Porque no solo de metal vive el hombre, hoy hablamos de música, en general. Y también de ciencia. Me apetece compartir un vídeo que he visto ya hace algunas semanas y que me pareció tremendamente interesante. Todos los que disfrutamos de la música sabemos, en mayor o menor medida, los grandes beneficios que está aporta, más allá de lo estético: nos sube el ánimo, nos carga las pilas cuando estamos en el gimnasio o andamos hasta arriba de tareas...
Tocar un instrumento además, te permite explorar y desarrollar otras habilidades (destreza motriz, coordinación, manejo de otro lenguaje, etc.) y sí: emularás a tus músicos favoritos y lo mismo hasta te ligas a alguien. Pero, ¿y si vamos aún más lejos? ¿Qué pasa en tu cerebro cuando tocas música? Echa un vistazo al siguiente vídeo y no pierdas detalle:
Ya sabes, la próxima vez que tus vecinos se quejen de tus porrazos, chirridos, crujidos y estruendos varios, les cuentas de qué va el asunto. ¡¡¡Corre a por tu guitarra (batería, bandurria, zanfoña, gaita, trombón... ) y dale caña a tus neuronas!!!